CUANDO TU NACISTE ELLA CAMBIÓ
Le cambió el cuerpo y le cambió la vida.
Ni bien asomaste la cabeza ella entendió
que con el tiempo su cuerpo iba a volver,
pero que su vida, tal cual la conocía, se había ido para siempre.
Aprendió que tu dependías de ella y que su felicidad dependía de ti.
Dejó de dormir ocho horas de seguido.
Primero porque llorabas y después porque llegabas tarde de tus salidas.
Le dolieron tus primeros golpes y soñó con dejarte las ruedas de la bici hasta los 18
Te cocinó muchas comidas, más de las que tu podías comer.
Te dio mucho amor, más del que tu podías entender.
Lloró cuando te graduaste y recordó que a ese flamante profesional le había
costado un montón aprender la tabla del 7.
Sufrió con cada una de las castigos que te impuso
mucho más de lo que pudistes sufrir tu.
Dejó de mirar los escaparates para mujeres y
empezó a revolver los canastos con ropa para niños.
Se perdió la novela para que tu puedas ver los dibujos animados.
Puso tu foto en su cartera y supo que tenía una fortuna incalculable.
El día que tu naciste tu madre descubrió que las madres
perdían muchas cosas pero que ganaban algo único.
Entonces, lloró mucho, como sólo puede hacerlo la mujer más feliz del mundo.
Este texto lo he copiado de mi amiga Katy