Hola; a pesar de mi edad o, gracias a ella, sesenta y muchos….soy
una enamorada de las nuevas tecnologías. Porque digo a pesar o, gracias a ello,
es que parece que al ir cumpliendo años, muchos, estas avocado a hacer viajes
con el Imserso o a dar largos paseos,( por lo de la artrosis). ¡¡Yo no!! No me conformo solo con eso, soy feliz delante
de mi portátil dando rienda suelta a mi imaginación, recuerdos, conociendo
familia desperdigada por el mundo que si no fuese por este “aparatico” nunca
hubiese soñado volver a saber de ellos. Para mí ha sido importante conocer
personas con las que, aun teniendo edades muy dispares, me siento agradecida de
haber conocido.
Mi portátil me ha dado seguridad, poder expresarme con mucha
más fluidez, puesto que aun habiendo ido hasta los catorce años al
colegio, faltaba mucho a clase, eso sí, siempre faltas justificadas por la
enfermedad de mi madre, no penséis que era una golfilla, nada más lejos.
Como decía eso de escribir un texto y poderle dar a una
tecla y corregirlo es una pasada. Para mí, las faltas de ortografía fueron un problema
a la hora de escribir una simple carta
por miedo a cometer errores, siempre podías echar mano del diccionario, jolín,
que complicado. Al no saber idiomas otra tecla y a elegir el idioma deseado.
Son innumerables las cosas a las que puedes acceder, este
mundo de Internet es inmenso y gracias a
cursos que voy haciendo y a la paciencia de mis hijos, me manejo bastante bien
y creo que, a día de hoy me será de mucha utilidad para estar en contacto con
mis seres queridos que van a estar lejos.
Me gusta mucho la poesía y cuando algún amigo las recita,
ufff, alucino. Y aprendo tantas cosas siguiendo los blogs de innumerables
amigos, cada uno con su personalidad, pero con un deseo en común, plasmar los pensamientos a través de nuestros
escritos, gracias por estar con vuestras inquietudes, dudas y consejos.
Si quiero pasearme por el mundo, no hace falta moverme de mi
casa, llegan correos magníficos de paisajes, monumentos, muchas veces virtuales y con toda clase de técnicas,
es, como lo diría, cuando menos relajante.
Recuerdo a mi bisabuela Carlota (con demencia senil) dando
vueltas alrededor de una mesa en la que habían
colocado mis abuelos una radio pequeña, ella no podía imaginar cómo podía estar
el hombre allí dentro para poder hablar, ja,ja, si viese ahora a Pau con la Tablet dándome clases.
Lo bien que me hará en estos momentos durillos seguir
estudiando la técnica del buen escribir, y lo que es más importante, el buen
leer, el fijarme bien en cada renglón leído para después poder escribir con
fluidez y talento. Me falta tanto que aprender….es otra forma de seguir
viviendo con inquietud y poder dar lo mejor de nosotros.
Como decía mi suegro “lo que se escribe, se lee” hombre sabio
y con mucha experiencia en lo vivido, que es lo que tenemos los mayores, años
vividos.
Espero, con calidad
de vida aceptable, poder escribir mis cosas mucho tiempo más.
Buen fin de semana